Priscila Silva (Arequipa, Perú, 1987) es ingeniera industrial y lleva desde 2020 en España, a donde llegó inicialmente para hacer un MBA en el Instituto de Empresa (IE).
Nunca antes la tecnología ha tenido tanta importancia en una gran operación financiera. Se trata de la OPA del BBVA sobre el Sabadell, técnicamente justificada por las sinergias
Ainhoa Isla (Sestao, 1994) estudió Química y en un máster de análisis forense descubrió que podía haber negocio inventando un dispositivo, una especie de cebo electrónico, que permita
Imanol Olaskoaga (Errenteria, 1966) estudió ingeniería en Tecnun e hizo un MBA en la Mondragon Unibertsitatea antes de ponerse a trabajar por cuenta ajena en firmas vascas de
Carlos Uraga (Getxo, 1986) estudió ingeniería y ha emprendido varias veces. El está detrás de Erle Robotics, Acutronic, Oxford School y su última aventura, Nantek, en la que
Alexandrina Grosu (Chisinau, Moldavia, 1991) vive en Markina desde que tenía 14 años y, después de trabajar en la cooperativa Maier, ha decidido emprender. Su proyecto, EscapeUp, que
Iban Lozano (Donostia, 1978) estudió derecho económico en Deusto y emprendió muy pronto en dos sectores muy relacionados: gestión de ayudas y organización de festivales. Reconoce que, a
El ingeniero industrial Francisco Carranza (Sevilla, 1976) ha sido hasta ayer el CEO de Basquevolt, la startup vasca que aspira a producir baterías de estado sólido. De espíritu
Fernando Gutiérrez (México DF, 1967) lleva 17 años en Mungia, desde donde ha iniciado su enésimo emprendimiento: una planta que generará fertilizantes a partir de desechos alimentarios. Utilizará
Unai Arambarri (Zumaia, 1999) ya hacía webs cuando estaba en la ESO y su evolución profesional siempre le ha llevado a ser un adelantado de la tecnología. Su