Cuando la Guardia Civil detuvo recientemente a una banda de narcotraficantes con un sofisticado aparato que permite localizar, con una precisión de cien metros metros, el punto exacto
“Una compañía discográfica decide publicar en Internet, de forma experimental, algunas canciones de los CD’s que va a comercializar próximamente. Si al internauta le gusta lo que oye,
Las gamberradas de unos chavales con sus ordenadores están convirtiéndose en acciones de auténtico terrorismo informático, mientras la policía empieza a actuar.
El lío de los dominios, o cachondeo, como prefieren describirlo los proveedores españoles de servicios de Internet, ha generado el más intenso ciberculebrón que pueda vivir la red
La introducción de la informática y las telecomunicaciones en las empresas está destruyendo muchos puestos de trabajo de tipo mecánico. Los grandes gurús y demás adivinos anuncian también
La red de ordenadores que comunica a todos los habitantes de un mundo cada vez más pequeño permite también realizar otras muchas actividades que plantean problemas legales hasta
“En Internet no existe la palabra ley”. Así de contundente es Marc Felip, asesor técnico de la empresa BCG Online y dedicado últimamente a montar empresas en Internet