Tecnología aplicada a los impuestos

La recaudación de impuestos es probablemente el ámbito más tecnológico de todos los que dependen de la Administración. Por una parte, por la necesidad de facilitar la vida al contribuyente para evitarle papeleos y viajes. Y por otra, por las ventajas que proporciona la tecnología para conseguir que todo el mundo pague lo que debe. Pero hay más posibilidades.


– Los drones que son capaces de explorar fincas privadas para detectar construcciones ilegales. Aunque esto implica ciertas dudas respecto a la privacidad, es sabido que las haciendas ya emplean Google Maps para averiguar si en un chalet se ha instalado, por ejemplo, una piscina.

– Big data y analítica avanzada. Este es un terreno con un potencial gigantesco, en cuanto permite analizar diversos datos para detectar bolsas de fraude o posibles impagos, especialmente en el caso de empresas que quieren aplazar pagos.

– Inteligencia artificial en la atención al usuario. Aunque en un principio, su aplicación se reducía a cuestiones básicas, la introducción de las redes neuronales está permitiendo crear asistentes virtuales capaces de responder a cuestiones con cierta complejidad técnica.

– Blockchain. La principal ventaja de esta tecnología es que permite mantener un registro de todas las operaciones, por lo que es evidente que su uso en materia fiscal no tardará en llegar. Por ejemplo, para hacer una declaración automática de una venta con IVA.

Añadir un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *