Sofía Benjumea, Google y un país en el que el Poder nunca cambia de manos

Reconozco no estar muy sorprendido por el hecho de que Google haya puesto a Sofía Benjumea Urizar al frente de su Google Campus de Madrid, en cuanto demuestra que el gigante de las búsquedas sabe cómo relacionarse bien con los poderes locales. Puede que sea una excelente profesional (no la conozco personalmente), pero su nombramiento confirma que en España las cosas no cambian, ni con los años ni con la tecnología.

Como dice Rubén J. Lapetra en Hemerotek, el buscador «ha encontrado un perfil institucional con buenos contactos entre la alta sociedad madrileña, los medios de comunicación y, en especial, con acceso al Gobierno». Su curriculum está lleno de nombres de periódicos y televisiones y sus padres, tíos, abuelos y demás han pasado por las principales empresas del país y por varios ministerios de gobiernos de derechas.

Sofía Benjumea es una de las herederas de una familia de terratenientes andaluces que supo relacionarse con el poder político madrileño, sobre todo el más derechista, e incluso con Neguri, donde residía la burguesía industrial vasca. Su padre, Javier Benjumea Cabeza de Vaca, hijo de conde y condesa, estudió en Deusto y se casó con la bilbaína Soledad Urizar Zubiría, vinculada a los fundadores del BBVA.

Hizo negocios comprando empresas en quiebra en los años ochenta que después revendía a trozos, junto con sus amigos José María Loizaga y Jesús Lobo. Con el tiempo a este negocio, que en algunos países se conoce como fondos buitres, se le llamaría capital-riesgo y empezaría a operar bajo el nombre de Mercapital.

Su tío Ignacio también se formó con los jesuitas y llegó a ser secretario del consejo de administración del Santander, entre otras cosas. Otro tío es Rafael, el conde de Guadalhorce, vinculado al Instituto de Empresa y ex consejero delegado de las dos principales empresas mineras españolas, Riotinto y Asturiana de Zinc, además de ex consejero de Abengoa o Urbis y ex presidente de la Fundación Marcelino Botín.

Pero la más conocida en la Red es probablemente su tía María, esposa del ex presidente de Vocento y del Instituto de Empresa, Diego del Alcázar. Es ella la que introdujo a Sofía Benjumea en el mundo de Internet a través de Infoempleo, un portal al estilo de Infojobs que fundó ella misma y después vendió al grupo de comunicación que dirigía su marido (!).

En Google Campus tendrá que tratar precisamente con emprendedores, puesto que se trata de una infraestructura que el gigante de las búsquedas pone en manos de cualquier persona que necesita un lugar desde el que poner en marcha su proyecto. Google les facilita instalaciones y asesoría con mentores especializados que Benjumea tendrá que reclutar.

Paradójicamente, ella nunca ha emprendido y en el Registro Mercantil solo figura como consejera de una Sicav familiar. Se valdrá sin duda de su experiencia al frente de The South Summit, un evento tecnológico celebrado dos veces en Madrid que aspira a ser el más importante de España, con permiso del 4YFN catalán, y que ha sido impulsado fundamentalmente desde el lobby que rodea al Instituto de Empresa.

Pero su familia sí tiene emprendedores relevantes, al margen de la anécdota de Infoempleo. Javier Benjumea Puigcerver, marqués de Puebla de Cazalla e hijo de un hermano de su bisabuelo, llegó a presidir Altos Hornos de Vizcaya y es conocido especialmente por haber fundado Abengoa y por haber liderado la nacionalización franquista de las minas de Río Tinto, hasta entonces en manos inglesas.

También fue emprendedor su bisabuelo Rafael Benjumea Burín, primer conde de Guadalhorce y promotor de las principales presas de Málaga y del metro de Buenos Aires, hasta el punto de que el dictador Primo de Rivera lo nombró ministro de Fomento en 1926. Además, accedió a la presidencia de Renfe durante el franquismo. Otro hermano suyo, Joaquín Benjumea Burín, primer conde Benjumea, llegó a ser gobernador del Banco de España en el mismo periodo.