Oliver Bieito (Kernova): «Lorenzo Viti me pareció la persona adecuada con la que emprender»

El ingeniero mecánico Oliver Bieito (Miranda de Ebro, 1981) y el ingeniero de estructuras Lorenzo Viti (Empoli, Italia, 1987) están detrás de Kernova, una startup que aspira a mejorar la eficiencia de diversas máquinas sustituyendo sus cilindros hidráulicos por otros electro-mecánicos. Bieito propuso a Viti participar en el emprendimiento porque vio en él las cualidades necesarias.

Esta es su historia:

  • Bieito trabajaba en una empresa australiana de diseño mecánico de maquinaria de prensado y la llegada de la pandemia le hizo pensar seriamente en emprender. «Lo único que me quedaba en mi trayectoria profesional era montar mi propio negocio. Era como un sueño, un paso que debía dar para completar el círculo. Y todo mi entorno me apoyaba. A Viti le conocía de mi trabajo anterior para Tewer Engineering y, por intuición y profesionalidad, me parecía la persona adecuada para acompañarme. Así que le planteé que se uniera al proyecto. Contacté por Linkedin con BIC Araba y hemos contado con toda su ayuda para establecer la startup en Vitoria-Gasteiz», explicó Bieito.
  • Viti lo vio claro desde el principio. Por su trabajo con maquinaria eólica y de automoción conocía perfectamente el problema que plantean los cilindros hidráulicos. «No tuve duda de que lo que me planteaba Bieito iba a funcionar. Me encantó la idea y ni siquiera me lo pensé. Me puse a desarrollar los primeros diseños y cálculos de validación del sistema electro-mecánico para una prensa de reciclaje y ahí seguimos. Si crees en los beneficios que puede aportar una tecnología, el trabajo se hace más sencillo», explicó Viti.
  • La tecnología desarrollada por Kernova tiene múltiples ventajas, empezando por un menor mantenimiento y un ahorro del 35% de electricidad. «Además, es más sostenible porque no genera residuos, también es más silencioso y sencillo de diseñar e implica menos riesgos porque no tiene componentes a presión. Con mantenimiento predictivo podemos saber cuánto va a durar cada componente. El aspecto negativo es que es entre un 35 y un 40% más costoso que la tecnología hidráulica. Está especialmente indicado para la industria de reciclaje industrial y para las máquinas que se montan para el mantenimiento de fachadas de rascacielos. Hemos solicitado una patente y ahora estamos buscando socios industriales para poder fabricar un primer prototipo», explicó Bieito.

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