Miguel Otero, el rey de las tragaperras

Hace dos días fallecía en Bilbao a los 67 años Miguel Otero Fariñas, uno de esos empresarios anónimos que a la chita callando tienen montado un imperio multimillonario. En su caso especialmente en torno a las máquinas tragaperras en el que gestionaba empresas como Olakoa, Eusko Jackpot o Compuplay con facturaciones multimillonarias y, de forma menos rentable, en el de las salas de fiestas. Dos sectores sin duda polémicos.