El origen vasco de Metrovacesa y el Metro de Madrid
|Es curioso lo poco que se conoce que la ‘Va’ de Metrovacesa, una de las mayores inmobiliarias del mundo, viene de ‘vasco’ o que los fundadores de esta empresa construyeron el Metro de Madrid. Se trata de los hermanos Otamendi y del Banco de Vizcaya, dirigido en su momento por Enrique Ocharan.
Todo empieza en 1913 cuando un ingeniero de minas madrileño con apellidos alaveses, Carlos Mendoza Sáez de Argandoña, se da cuenta de la conveniencia de poner en marcha un ferrocarril subterráneo mientras esperaba en la cola a coger el tranvía en la Puerta del Sol. Mendoza había estado en París durante su luna de miel y ya conocía lo que era un metro, lo que por cierto me recuerda a mi primer viaje a Madrid y la ilusión que me hizo montar por primera vez en este medio de transporte.
Así que Carlos Mendoza se pone en contacto con algunos compañeros de estudios. En concreto con los donostiarras Miguel Otamendi y Antonio González Echarte. Los tres juntos presentaron ese mismo año un proyecto de red de metro para una ciudad que por entonces tenía 600.000 habitantes. Pocos creyeron el proyecto viable, lo que no les impidió ir a pedir capital-riesgo a varios bancos. Sólo en el Banco de Vizcaya, que entonces dirigía Enrique Ocharan, les escucharon y aportaron 4 millones de pesetas de los de entonces. Presupuesto total de la obra: 9 millones.
Otro millón provino del Rey Alfonso XIII, transformado en lo que hoy se denominaría business angel, con la ventaja de que animó así a otros inversores a participar en el proyecto. Y parte del dinero se gastó en Euskadi: de las obras se encargó la empresa vasca Hormaechea y Cía, las vías y la perfilería de las cocheras las fundió Altos Hornos de Vizcaya y los trenes los fabricaron entre Talleres de Beasain y Carde y Escauriaza, que conforman la actual CAF, con sus dos plantas de Beasain y Zaragoza.
El consejo de administración de este primer metro de Madrid estuvo repleto de vascos: Enrique Ocharan (presidente), Venancio Echeverría, Antonio González Echarte, Miguel Otamendi, Dámaso Escauriaza, Carlos Eizaguirre o Tomás Urquijo. La primera línea, entre Sol y Cuatro Caminos, se inauguró en 1919 con una longitud de 3,48 kilómetros.
Tuvo un enorme éxito y en su primer año transportó a 14 millones de personas. A los pocos meses ya estaba dando beneficios directos para sus socios. Pero el negocio no terminaba ahí. La apertura del metro despertó el interés inmobiliario de zonas de Madrid que hasta entonces se consideraban periféricas. Es ahí donde interviene Metrovacesa.
En 1918 se constituyó una compañía, Urbanizadora Metropolitana, para urbanizar esos terrenos que en principio iban destinados a cocheras. Y sus promotores fueron nada más y nada menos que los hermanos Otamendi Machimbarrena, que integraron en el capital a sus socios del metro de Madrid y al Banco de Vizcaya, que repetía así apuesta con los Otamendi, dado el éxito de la inversión anterior.
Urbanizadora Metropolitana construyó algunos de los principales edificios de la capital, entre los que destacan la Torre de Madrid o el Edificio España y la mayor parte de los que rodean a la Gran Vía. Años después, en 1946, el Banco de Vizcaya creó Inmobiliaria Vasco-Central (Vacesa) en Bilbao. Vacesa y Urbanizadora Metropolitana no se fusionarían hasta 1988 para formar Metrovacesa (Metropolitana Vasco Central). Tras una OPA, la inmobiliaria Bami de Joaquín Rivero la absorbería en 2003 y curiosamente mantuvo el nombre de Metrovacesa en lugar de Bami.
Para entonces sólo quedaba un accionista de los originales, Alvaro Churruca Otamendi, nieto de José María Otamendi Machimbarrena. Los Machimbarrena fueron, de hecho, una familia muy reputada en Gipuzkoa. El tío José María Machimbarrena Echave fue alcalde de Donostia y presidente de la Caja de Ahorros de Gipuzkoa. Su tío Fermín, «señor de Machimbarrena», fue también alcalde de Donostia, diputado general de Gipuzkoa y diputado en Cortes. Finalmente, otro primo suyo fue presidente de la Diputación de Gipuzkoa en 1902.
El metro de Madrid, por su parte, siguió creciendo hasta los años setenta, cuando la crisis mundial también le afectó. Finalmente, en 1978, el Estado decidió expropiar la empresa canjeando sus acciones por otras de Telefónica o por dinero en efectivo. Sólo entonces dejó de ser una compañía privada.
(añadido en 2017) En la revista Madrid Histórico se hicieron hace poco eco del origen vasco del metro de la ciudad. Resaltaría el siguiente párrafo:
Los que materializaron el sueño de viajar bajo la ciudad, con un transporte que solo existía en menos de una decena de ciudades de todo el mundo, no fueron hijos de Julio Verne, ni ingenieros europeos como los que habían construido el ferrocarril en España, sino emprendedores de Euskadi, orquestados por el ingeniero Miguel Otamendi. Fueron los vascos -al calor de la industria siderúrgica- quienes revolucionaron Madrid: la modernidad dependía de los Altos Hornos de Vizcaya.
Impresionante artículo, más datos imposible 🙂
Siempre he tenido curiosidad por el origen de esta empresa porque conocía parte de su historia… grata sorpresa hoy en mi email. Gracias!!
Gracias por recoger esta información , siempre había oído cosas pero no tan detalladamente. La familia Machimbarrena seguimos procurando hacer las cosas lo mejor posible.
Al leer su artículo me doy cuenta de un error que aclaro a todos los lectores:
Carlos Mendoza ( abuelo ) fué Ingeniro de Caminos como lo fué también Miguel Otamendi.
fELICIDADES POR EL ARTÍCULO.
LOS DESCENDIENTES DE OCHARÁN ME HAN FACILITADO NUMEROSA CORESPONDENCIA QUE TUVO CON MENDOZA
UN SALUDO
Querido José Antonio del Moral:A estas alturas, seguir defendiendo, el nacimiento en Euscadi de Don Antonio G. Echarte Jiménez Valmaseda… solo se puede deber a malicia o ignorancia. Si lo primero, no hay perdón para los responsables del Metro, empeñados en mantener las mentirs de la historia de Metro de Madrid, si lo segundo -es decir por ignorancia- Te informo: Don Antonio G. Echarte nació en la Calle Preciados de Madrid nº 23 en noviembre de 1864. Su madre era una cubana, nacida en la Habana, y su padre, ¡ese es el gra secreto! ,que se esconde bajo la G de González… pero en ningún caso vasco… algo puedes conocer con la lectura de mi Biografía sobre el Fantasma del Metro de Madrid…
Espero ayudarte así en incrementar tus conocimientos sobre el Metro de Madrid y en concreto sobre el verdadero creador de esta obra tan importante para esta ciudad en que vivimos.
Magín Coello
¡Me olvidaba! Espero que el resto de las informaciones de tu artículo sean más veraces que la foto de cabecera que las ilustra.
Esa foto es una falsificación realizada por la agencia EFE, después de la guerra. En ella la imagen de Echarte -ese hombre de barba, que está detras de Alfonso XIII, tiene setenta aaños- y el día de la inauguración del Metro G. Echarte tenía unos cincuenta… Suya sólo es la ceja y frente que asoma detras de la acompañante de Miguel Otamendi… Así se escribe la Historia… Así era de discreto Don Antonio G. Echarte … para entonces, en los años cuarenta, Otamendi y Mendoza ya eran Miembros del Consejo Nacional del Movimiento… Echarte un simple amigo de Marañón, Zubiri, Edison, Madinabeitia, Amérido Castro, Prieto etc. etc.
Puestos a ayudar… La placa con los nombres de los fundadores del Metro, que en realidad es un volumen cuadrangular y que ahora está en la Estación de Sol, con la que ilustra J.A. del Moral su trabajo, es todo un símbolo de la guerra de mentiras vertidas sobre la Historia del Metro… El bocetto de la obra llevaba los nombres por este orden: Mendoza; Otamendi, Echarte… Menos mal que todavía vivía el Conde de Martín Moreno y algunos otros que conocían la historia del Metro… y en honor a esa verdad se exigió poner el primero a Echarte, después Mendoza y por último el bueno de Miguel Otamendi… Antonio y Miguel habían sido invitados a la inauguración del Metro de Nueva York el año 1904, como delegados Regios en la Exposición Universal de SAn Luis. Además Echarte había viajado a Londres, París y Ginebra para tomar nota de todos los adelantos en materia de transporte subterraneo, después de haber traído a Madrid la primera luz eléctrica de origen hidráulico. El Metro sin la luz de MENGEMOR e Hidráulica Santillana nunca pudiera haber recorrido el primer Trayecto entre Sol y Cuatro Caminos…
… y esto va para Don Carlos Mendoza, nieto de unos de los miembros del trio del METRO de Madrid, quien nos recuerda que su abuelo y Miguel Otamendi eran Ingenieros de Caminos Canales y Puertos… Curiosamente fue otro Miguel Otamendi, tambien nieto de otro de los protagonistas, quien me puso en duda, cierto día a finales de los años noventa, en la sede del Metro, en la Calle Pacífico, el título de Ingeniero de Don Antonio G. Echarte. Por si dudas, querido Carlos -puesto que solo haces referencia a los títulos de Mendoza y Otamendi- te diré que G. Echarte hizo la carrera en la primera Escuela de la calle del Turco, donde logró su título como Ingeniero de Caminos Canales y Puertos el 23 de septiembre de 1889 y después, cuando se traladó la Escuela a los Altos del Retiro, sacó su cátedra de Electrotecnia y ejerció de catedrático varios años, formando a muchas generaciones de Ingenieros, convirtiendo la Escuela de Madrid en una de las más prestigiosas del mundo… sí, sí.. tengo testimonios de varios ingenieros de fama internacional como Thonson, Perry, el propio Tomás Alba Edison, el Profesor De Las etc. o el propio profesor de la Escuela de Ingenieros Industriales de Bilbao, Don Eduardo Navarro Beltrán, quien así lo afirma en carta enviada desde Cuba el año 1912. Esto explica que G. Echarte tomara parte en la homologación internacional de los Watios, Voltios, Herzios, ohmios, faradios…
No en vano el mejor historiador de la profesión, Fernando Sáenz Ridruejo, sitúa a Echarte a la cabeza de la Ingenieros REGENERACIONISTAS de España. ¡¡¡ Mañana más !!! queda mucho que hablar de la historia del Metro de Madrid y sus protagonistas.
Hace ya mas de tres años que intente esclarecer algunos aspectos de la vida de G. Echarte y prometia seguir con mis datos, pero a la vista de las nulas reacciones de los aludidos… por pereza o por negligencia… suspendo mis aportaciones…no merece la pena…
Si es que Damoso Escauriaza jizo mucho por el gran Bilbao y por el metro de Madrid …
Todavia mantiene su apellido uno de sus edificios en Maria Diaz de Haro.