Chiquilín y Artiach cambian de dueño otra vez

Nuevo cambio de manos de las marcas de Artiach. Tras ser compradas por Kraft a United Biscuits en 2006, la compra de LU Biscuits a Danone obliga a Kraft a desprenderse de varias de sus marcas: Chiquilín, Filipinos, Marbú, Artiach, Artinata y Dinosaurs, como condición impuesta por las autoridades europeas de competencia. En la venta también se incluye la planta de Orozko (Bizkaia), donde trabajan 200 personas.

La operación ha despertado el interés de empresas competidoras (Cuétara, Siro o Gullón) y del ramo de la alimentación que quieran complementar su oferta con galletas (Panrico o Nutrexpa) pero lo novedoso del caso es que el prestigio de las marcas puede atraer al capital riesgo, que pueden verlo como una oportunidad de negocio. Es la externalización total. Como se ve, ninguna empresa vasca de alimentación en el horizonte para recuperar la marca vasca y el centro de decisión asociado. Supongo que en Orozko estarán preocupados, ya que cada cambio de dueño supone un nuevo riesgo de que deslocalicen la producción a lugares más baratos y así ir rentabilizando más rápidamente la inversión. Seguramente sería el caso del capital riesgo, que no se sulen andar con miramientos en ese aspecto. Sin embargo, si el nuevo dueño fuera SOS Cuétara Koipe se convertiría en una ocasión para la familia bilbaina Salazar para aumentar su producción en Euskadi.

La compra del negocio de United Biscuits en el sur de Europa incluyó la marca Fontaneda, pero ésta no se verá afectada. Es impresionante la cantidad de marcas que atesoran las multinacionales de la alimentación: sólo en galletas Kraft mantendrá Oreo, Chips Ahoy, Fontaneda, Lu, Príncipe y Vitalínea, entre otras. Si nos fijamos en otros productos, la multinacional estadounidense cuenta con productos en los sectores del chocolate (Milka, Suchard, Toblerone), queso (Philadelphia, El Caserío), café (Saimaza), paté (Apis) zumos (Fruco) y postres (Royal). Puedes estar todo el día consumiendo productos de una misma multinacional.

(Actualización 20.04.08) Panrico compra el negocio de galletas Artiach y su fábrica de Orozko

(Actualización 26.11.12) Vuelven a cambiar de dueño. Desde hoy pertenecen a Nutrexpa, propietario de Cola-Cao y de Cuétara. Las galletas Artiach no son una peste que todos se quieren quitar de encima sino un patrimonio muy rentable que, en los momentos malos, permite mantener el núcleo de otros grupos.