Julen Martínez (Ironchip): «Nuestro primer cliente llegó a través del programa Bind 4.0»

Julen Martínez (Barakaldo, 1992) y José Fernando Gómez montaron Ironchip en 2017 mientras estudiaba ingeniería de telecomunicaciones. Empezaron desarrollando software para otros y terminaron centrándose en la ciberseguridad, especialmente tras captar su primer cliente a través del programa Bind 4.0. Ya llevan cuatro rondas de inversión, han captado 3 millones de euros y aspiran a una valoración de hasta 25 millones de euros.

Esta es su historia:

• Los fundadores de Ironchip compatibilizaron, en sus primeros tiempos, los estudios con el trabajo. Aprendieron a programar por su cuenta y encontraron un cliente a través de las redes sociales. «Unos americanos nos contactaron a través de facebook y nos pidieron ayuda para desarrollar una plataforma digital para inversores en bolsa. Nos pidieron un piloto y se hicimos en apenas dos semanas, así que nos eligieron a nosotros. Dormíamos cuatro horas al día y en casa no nos veían. ¡Nuestros padres pensaban que era una estafa! Pero este proyecto nos dio trabajo durante varios años y nos enseñó muchas cosas. Y especialmente una: la detección de posibles fraudes, que es lo que nos llevaría después a orientarnos hacia la ciberseguridad», explicó.

• Aunque los promotores de Ironchip veían un hueco en la ciberseguridad, no se lo terminaban de creer. Fue con la ayuda de dos programas de aceleración como terminaron de centrarse en este sector. «Primero entramos en el Incibe, Instituto Nacional de Ciberseguridad, con un producto mínimo viable muy básico que habíamos hecho bastante rápido. Ahí nos ayudaron mucho a identificar tecnológicamente como desarrollar el producto y fue como nos dimos cuenta de la importancia que tiene la geolocalización a la hora de autenticar a un usuario. Después entramos en Bind 4.0, donde nos ayudaron con el desarrollo más comercial. De su mano empezamos a trabajar para Batz y Elecnor, que querían proteger sus infraestructuras. Más tarde llegaría Abanca, que también es inversor y nos ha llevado a especializarnos en el sector financiero. Somos ya 28 personas y hemos alcanzado el break even financiero», explicó.

• El producto de ciberseguridad que ofrece Ironchip se basa en la geolocalización de las personas que están intentando acceder a una infraestructura o a un sistema informático. A nivel técnico, mezcla ondas de radio, televisión y móviles con inteligencia artificial. «La localización solo por IP es muy fácil de falsear. Nosotros triangulamos entre las diversas torres de móvil que reciben una señal para tratar de averiguar dónde está quien lo porta. Después estimamos si esa persona debería estar realmente ahí o no. Si alguien se conecta siempre desde Barakaldo, hay que sospechar si hoy está en Algeciras. Después le damos esa información a nuestro cliente para que decida si necesita realizar una mayor verificación del usuario. Al principio estábamos solos y, después de que Gartner bautizara a esta tecnología como «location intelligence», han entrado dos competidores. De hecho, para este año queremos internacionalizarnos, es probable que con ayuda de fondos extranjeros»