Jorge García del Arco (Aquaradar): «Nos podrían contratar para saber el nivel de coronavirus de una ciudad»

Jorge García del Arco (Bilbao, 1970) es un emprendedor que lleva años combinando sus vocaciones social y tecnológica. Su última iniciativa es Aquaradar, una startup que ha desarrollado una tecnología que analiza el agua con finalidades tan diversas como la detección de agentes contaminantes o simplemente la calidad de la misma. Entre sus capacidades, García del Arco destaca la posibilidad de saber en tiempo real el nivel de coronavirus de una ciudad.

Esto es lo más interesante que nos contó durante la entrevista:

• Aquadat empezó recogiendo datos de los océanos para supervisar la pesca sostenible y ha terminado analizando el agua en general. Entre sus finalidades figuran desde la certificación constante de la calidad del agua utilizada en una planta de Coca-Cola hasta la detección de contaminantes en las aguas residuales o en las vertidas por las industrias. «Las alertas tempranas son una de las salidas comerciales que vemos con mayor potencial ahora mismo», explicó.
• Su tecnología integra hardware y analítica de datos. El primero permite recoger el agua y obtener datos con sensores que después son enviados mediante conexiones de telecomunicaciones en lo que constituye una aplicación de la Internet de las Cosas (IoT). La segunda es la que permite extraer conclusiones con las que tomar decisiones a partir de la información recabada.
• La aplicación de esta tecnología al análisis de las aguas puede ser revolucionaria. García del Arco explicó que actualmente se efectúan muy pocas tomas de las aguas de consumo y aún menos de las residuales, por lo que es difícil detectar a tiempo problemas. «El agua es demasiado barata, por lo cual no se suele gestionar a fondo. Echo en falta que los reguladores hagan uso de su función de control», explicó.
• En lo que al futuro se refiere, García del Arco se aventura a predecir que llegaremos a poder analizar el agua que llega a nuestras casas con el móvil o para detectar enfermedades a partir de las aguas residuales. «La tecnología ya la tenemos disponible», añadió.