Igor de la Sota y Gonzalo Martínez de Azagra, los vascos que abren las puertas de las startups de Israel

Los vascos Igor de la Sota y Gonzalo Martínez de Azagra son los dos socios principales de un joven fondo de inversión que se ha especializado en identificar startups tecnológicas de Israel, Cardumen Capital. Formados los dos en el Reino Unido, De la Sota trabajaba previamente en una firma del sector financiero en Madrid mientras que Martínez de Azagra, que vive en Tel Aviv, era el responsable de Samsung Ventures en el país hebreo.

Su papel es intermediar entre firmas de inversión y convencionales interesadas en ampliar su potencial tecnológico y startups de Israel, que se ha convertido en un auténtico Silicon Valley para sectores como la automoción, la biotecnología o la seguridad. De hecho, las principales corporaciones del mundo tienen divisiones de capital-riesgo o de I+D en el país hebreo. Una de ellas es, sin ir más lejos, Telefónica, que ha invertido en varias startups de Israel.

De la Sota y Martínez de Azagra identificaron este interés, especialmente entre empresas del Ibex, y decidieron dejar sus trabajos y crear Cardumen hace aproximadamente un año. Registraron el fondo en la CNMV, recaudaron 50 millones de euros y lo pusieron en marcha, tras lo cual se les ha unido Roy Gottlieb, precisamente quien sustituyó a Martínez de Azagra en Samsung Ventures. Una ventaja adicional es la similitud cultural entre Israel y España, dos países muy unidos por la historia y el Mediterráneo.

Entre los interesados destaca especialmente el Banco Sabadell, que acaba de firmar una inversión de 7,5 millones en Cardumen Capital. A la entidad financiera catalán le interesa especialmente todo lo relacionado con las fintech, un conjunto de tecnologías disruptivas que «amenazan» con revolucionar todo el sector financiero. Además, Gottlieb y González de Azagra son mentores del programa de aceleración vasco Bind 4.0.