España vs. Cataluña: una ejemplar batalla digital

Lejos de asustarme, la batalla entre una gran parte de los políticos españoles y los independentistas catalanes me cautiva. Sin derrarmar ni una sola gota de sangre, ambos bandos están combatiendo con armas fundamentalmente digitales para satisfacer a sus correligionarios y captar, si cabe, más adeptos a sus respectivas causas.

Es una guerra mediática que se juega fundamentalmente en la televisión y en Internet y que tiene como grandes capitanes tanto a los líderes políticos como a los de opinión (periodistas + influencers). Los espectadores, incluso los que pinchan en «megusta» o retuitean, son los soldados de esta particular batalla. Nadie dispara.

Las piezas del tablero de ajedrez se mueven de una forma más o menos previsible, porque tampoco hay tantas damas ni movimientos posibles. Y sobre todo porque el jaque mate no existe en este tipo de guerras. Todos ganarán, cara a su galería, claro está. Después de la escenificación de la batalla, que es lo único que realmente importa a los capitanes, unos habrán conseguido más autonomía y otros habrán salvado la patria.

En medio habrán quedado millones de tweets, ríos de tinta, broncas radiofónicas y horas de televisión buscando la atención de los ciudadanos de uno y otro bando. Armas y sangre exclusivamente digitales, afortunadamente. Los reyes habrán amenazado varias veces con jaque pero nunca habrán llegado a lanzarlo. Lo único que les interesa, en lo que les va el sueldo, es la guerra en sí misma. Y, lo reconozco, semejante espectáculo no deja de parecerme apasionante.