Bajo el puente de Deusto

– Oye Iñaki, ¿y cómo es que ya no vamos a bañarnos desnudos al río a las 7:00 de la mañana?


– Es que, Aitor, despues me empalmo y me daño la polla contra las piedras del río.
– Anda, ¿y por qué no nadas a espalda, pues?
– ¿Y qué hago con el puente de Deusto, pues?

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