Mr. Bombero de Bilbao

Menudo éxito que ha tenido el calendario de los bomberos cachas de Bilbao, que ya circula libremente por Internet. Mujeres de medio mundo se vuelven locas tratando de conseguirlo, bien para apoyarles en su participación en las olimpiadas o bien para alegrarles la vista todos los días. Pincha aquí si quieres bajarte el power point del calendario. Como sigamos así, a los bomberos vamos a tener que seleccionarlos nosotras y no en base a su capacidad para salvarnos de un incendio sino para otras cosas. Y no lo digo sólo yo, lo dicen también en Vaya Semanita.


Febrero. Pocos días tiene febrero para disfrutarlo. Tenía que ser toda un eternidad para poder disfrutar de este bombero. Nunca una barandilla doy para tanto: ¡Cómo se desliza por ella para ir a apagar un fuego! Este mes, aunque frío, se calienta con este bombero. A partir de ahora, los meses de frío nunca tendrán tan pocos grados en mi corazón. Me he enamorado de febrero.

Marzo. Venid en mi busca. Los demás, poneos en la lista si queréis, pero yo les he llamado antes. Lo malo es que si aparecen así en un incendio creo que provocarían más de un grito y no de dolor o angustia sino de admiración o de alegría al ver semejantes cuerpos enfundados en sus trajes y en sus cascos. Esa barba de tres días, esa tableta y no precisamente de chocolate hacen que sean ellos nuestro peligro.

Abril. Esa niña no sé si sabrá en qué brazos está. Pero ni el recuerdo de la primera comunión o de su boda será tan dulce como el de que abril te arrulle entre sus brazos. Querida niña, no llores, algún día sabrás cuánta envidia te tendrán. ¿Por qué no me cogieron a mí? Total, por unos cuantos kilos de más apenas se notaría y me hubiese alegrado el milenio.

Mayo. Empieza a llegar el calor y todos queremos ponernos en forma para enseñar ese cuerpo escondido en los abrigos del invierno. Yo llevo mal lo del gimnasio, pero creo que partir de ahora no será ningún sufrimiento si voy al gimnasio de los bomberos del mes de mayo. También he pensado ser la monitora o ayudante para llevarles la toalla y quitarles el sudor de sus frentes.

Junio. Llegan las camisetas, pantalones y cuerpos como el de junio. Cuerpos danone y de bifidus activo. Algn@s necesitamos cuidarnos y otros, sea por la madre naturaleza o por el paso del gimnasio, nos dejan perplejas. Con este calor necesitaría refrescarme y la manguera sería un buena opción, siempre que sea junio quien me duche.

Julio. Las labores de casa nunca se me dieron bien. Invito a Julio a que me ayude a limpiar mi casa. Creo que tendría que ir preaparado por si acaso se propaga algún fuego de envidia entre las vecinas al ver semejantes ayudantes. Luego tendrán un pequeño lunch para reponer fuerzas, Y si alguno esta cansaso hay camas de sobra, o eso creo.

Agosto. En este mes nací yo y en este mes está «mi hombre», el bombero del mes de agosto. Menudo cuerpo se gasta y su cara de niño tiene carácter. ¡¡¡¡¡ Chiquillo, lo tienes todo !!!! Se nota que es uno de mis preferidos. Dejará huella allí por donde pase. Me han regalado casi todo lo que he pedido pero todavía no tengo a mi agosto. ¿Lo conseguiré?

Septiembre¿Os acordáis del anuncio de «para mi madre, para mi hermana, para mi cuñada, para mi amiga, para mi suegra»? Tenemos para todos, para repartir bomberos en setiembre. Así que alguno tendrá que hacer doble turno si quiere satisfacernos a todas. ¡Cómo están estos cuerpos! ¡Caídos del cielo, o del infierno, según se mire!

Octubre. Pero qué envidia me da ese perro. Nunca sabrá la suerte que tuvo de ser cogido por los brazos torneados de octubre. Me gusta todo de él y que salve al perro me da sensación de ternura. Hay hombres que lo tienen todo y otros que se quedan con los restos (que a veces no están tan mal), pero chicos, ¿qué queréis que diga ante tal hombre?

Noviembre. No lo tenía claro pero al ver Noviembre he decidido que este es mi mes. ¿Qué puedo decir que no se haya dicho? Sí, podría decir un montón de cosas que no sé si proceden. Un consejo para estos chicos: cuidaos que podéis coger frío por la espalda. Allá donde la espalda se pierde me encuentro yo con semejante panorama.

67 comentarios

Responder a Ana Esperanza de Sevilla Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *